Relator Especial no recomienda una investigación pública sobre injerencia extranjera

Se requiere un proceso público adicional para abordar las cuestiones relativas a la injerencia extranjera, pero no debería ni es necesario que se lleve a cabo una investigación pública separada, dijo el ex gobernador general en un informe presentado en Ottawa este martes 23 de mayo.

Johnston, nombrado por el primer ministro Justin Trudeau como relator especial sobre la injerencia extranjera en marzo en respuesta a filtraciones de la inteligencia canadiense publicadas en la prensa canadiense sobre la injerencia del gobierno chino y la reacción de furor entre las filas de la oposición política, ha pasado los dos últimos meses revisando documentos y entrevistando a responsables de políticas.

Aunque Johnston no recomienda una investigación pública, en su informe sostiene que ha detectado graves deficiencias en la forma en que se comunica y procesa la información de inteligencia desde las agencias de seguridad hasta el gobierno.

Johnston dijo que continuará su trabajo como relator especial hasta octubre, llevando a cabo audiencias para encontrar la manera de solucionar esas deficiencias. Dijo que elaborará un segundo informe a finales de este año.

El proceso público debe centrarse en reforzar la capacidad de Canadá para detectar, disuadir y contrarrestar la injerencia extranjera en nuestras elecciones y la amenaza que dicha injerencia representa para nuestra democracia.

Johnston dijo que no encontró ninguna falta ética en la forma en que el gobierno de Canadá manejó la interferencia extranjera.

Creo que la afirmación de que el gobierno falló en actuar no es una conclusión justa basada en los hechos, dijo Johnston. Sin embargo, la maquinaria del gobierno necesita mejoras significativas para hacer frente a la amenaza cambiante de la injerencia extranjera.

Intentos de intimidación e influencia

Citando fuentes de seguridad nacional no identificadas, el periódico canadiense Globe and Mail y la red Global News reportaron una serie de operaciones de intento de influencia e injerencia, originadas en Beijing en particular durante las elecciones de 2019 y 2021.

Esas operaciones incluyen intentos de intimidar e influir en los miembros del Parlamento canadiense, financiando candidatos políticos y operando las llamadas comisarías de policía chinas en algunas ciudades de Canadá para intimidar a los disidentes.

Johnston dijo que, aunque la amenaza de injerencia extranjera es real y Ottawa debe abordarla, encontró que gran parte de la información publicada por los medios de comunicación sobre el tema contenía malas interpretaciones y carecían de contexto después de que él revisó la inteligencia relevante.

Johnston se mostró especialmente crítico con la persona o personas que estaban detrás de las filtraciones sobre seguridad nacional.

Cualquier profesional de los servicios de inteligencia responsable sabe lo destructivas y peligrosas que pueden ser las filtraciones, afirmó Johnston. Es urgente que se haga todo lo posible para identificar y responsabilizar al autor o autores de las filtraciones. No se puede descartar intenciones de dolo.

La Real Policía Montada de Canadá se encuentra investigando la o las fuentes de esas filtraciones de inteligencia.

Fuente: CBC / R. Raycraft

Adaptación: RCI / R. Valencia